dimecres, 26 d’octubre del 2011

MAGIA Y AGUA

Tomás, si, así se llamaba era un niño de solo 10, viva con sus padres y con su hermano Ethan. Vivian al norte de Australia concretamente en Darwin. Era un familia muy feliz, sus padres trabajaban en una gran empresa de tablas de surf y tenía una gran relación con su hermano. Vivian felices con todos los vecinos, iban a sus fiestas, celebraban los cumpleaños, etc. solo los diferenciaban una cosa que los vecinos nunca sospecharían. Poseían unas cualidades extraordinarias, eran magos. Formaban parte de una especie de orden mágica donde velaban por la seguridad de todo el mundo.

Un tarde, como muchas otras, Tomás se quedo con Ethan en casa mientras esperaban a sus padres, pasaran las 5, las 7, las 9 y no llegaban nunca. De repente empezó a entrar gente en la casa y Tomás estaba muy aturdido y perdió el conocimiento.

Cinco años más tarde….

Tomás se encuentra en una habitación con las paredes azules y muchas ventanas por donde entra mucho el sol, su habitación está un poco desordenada y Tomás está leyendo un libro que le han mandado en la escuela. Su ‘’madre’’ entra en la habitación.

-Hijo me voy con tu padre de compras, no volveremos muy tarde y saca a pasear al perro.

- ¡Vale mama no te preocupes lo hare!

Observa cómo sus padres cogen el coche y se van. Tomás fue adoptado por Marian y Ege dos australianos muy simpáticos a los que Tomás amaba con todas sus fuerzas. Vivian en Saint-Malo un pueblecito de costa de Australia. A Marian y Ege les encantaba la playa y el surf y casi todos los fines de semana iban a practicar surf.

A Tomás le encantaba quedarse en casa solo porque así ponía la música muy alta y se sentaba a escucharla en el sofá sin hacer nada. Cuando se canso de estar ahí sin hacer nada decidió ir a sacar al perro pero claro, necesitaba dinero para comprarse algo así que se fue al cuarto de sus padre a cogerles dinero. Empezó a rebuscar por todos los cagones, el armario…todo. Cuando se le ocurrió mirar en los cajones de la sala de estar se encontró con una especie de libro muy antiguo, era como un diario.

Empezó a leerlo, y en ese libro contaba todo lo sucedido la noche en que sus padres desaparecieron junto a su hermano Ethan.

-¡¿Cuántas veces te hemos dicho que no abrieras esos cajones?!- le grito su padre muy enfurecido.

-Papa, lo siento, yo no quería …pero necesitaba dinero y y estaba buscándolo… y no se papa, lo siento!

-¡¿Qué lo sientes?! Ahora ya lo has hecho….

-Ege tranquilízate, tarde o temprano teníamos que contárselo, ja tiene 15 años creo que va siendo hora de contárselo todo- dijo Marian.

-¡Contarme el que!- respondió gritando Tomás.

-Mira, hay muchas cosas que no sabes… no sabes cómo desaparecieron tus padres, donde está tu hermano y porque nosotros tenemos esta información.

-Pues contármelo ya! ¡A que esperáis?- dijo impaciente Tomás.

-Todo empieza cuando tú cumpliste los nueve. Tus padres te dijeron que te quedaras cuidando a tu hermano mientras ellos trabajaban. Vale como bien sabes somos magos como tú, pero lo que no sabes y te hemos estado ocultando es que posees un poder muy especial que solo se encuentran en los magos de verdad. Este poder ayudara a vencer a la bestia que vive en las aguas de este mar, el que no nos deja manifestarnos en público. Vale existe otra orden, un orden que está a favor de que no nos manifestemos en público y que no podamos velar por la seguridad de la gente. Entonces como los que poseéis esta peculiaridad debéis ser destruidos perqué nadie más puede destruir a la bestia.

-Explicarme una cosa, ¿porque ahora me quiero y no mucho tiempo antes? Y ¿Dónde está mi hermano?- pregunto Tomás muy nervioso.

- Han pasado tantos año porque ese trágico día en el que tu padres desaparecieron llamaron mucho la atención y debían de dejar que pasara mucho tiempo. Te voy a contar todo lo que sucedió es noche.

Los de la otra orden esperaron un día en que no estuviéramos muy preocupados por ti. Entonces ellos atacaron, entraron por la puerta, por la ventanas, por sitios que nunca te imaginarias. Pero nosotros fuimos mas rápidos y pudimos llegar a tiempo. usamos muchos hechizos hasta que al final se fueron. Yo te encontré al lado del sofá sin conocimiento y llegamos a la conclusión que deberíamos llevarte lejos y también separarte de tu hermano. Respecto a tus padres nunca volvieron a casa y sospechamos que no están muertos si no que los tienen como rehenes para sacarles información.

-Hace unos días tu madre y yo recibimos una carta de la orden. Donde nos decían que habían visto a Marcus, el causante de todo, formando un ejército de agua. Por eso te tenemos que preparar para lo que sea.

-A ver a ver a ver… ¿que yo también tengo que luchar contra ellos?

-Sí, nosotros no podemos hacer nada contra la bestia y tu junto a los magos como tú nos liberareis…-dijo Marian un poco decaída.

-¡Pero si yo no sé que tengo que hacer, no puedo hacer nada contra ellos!

- Nosotros te ayudaremos con todo los preparativos, tranquilo nosotros estamos aquí.

-de acuerdo pero ahora me voy a mi cuarto porque necesito pensar un poco-dijo Tomás un poco preocupado.

Se acostó en la cama y empezó a pensar. Su padre entro por la puerta con un gran baso de limonada que Tomás agradeció mucho, empezaron a hablar sobre lo sucedido y de que el aceptaba la propuesta de ir a por los de la orden y la gran bestia. Dos semanas más tarde Tomás ya sabía usar sus poderes a la perfección y se sentía muy preparado para lo que viniera.

Una mañana, la gente de Saint-Malo está muy preocupada porque esa mañana había una tormenta muy grande, jamás vista y tenían miedo de que se inundaran sus casas.

Tomás sabia que ese mañana era el gran día esperado. Así que se fueron a la playa donde lo primero que reconoció fue a su hermano Ethan que se fundieron en un gran abrazo, Ethan estaba un poco desorientado porque no lo acaba de reconocer porque cuando se separaron el tenia 6 años . Conoció a mucha gente de la orden mágica quienes le explicaron lo que tenía que hacer. Pasadas unas horas el mar se volvió loco, las olas eran de más de 12 metros, gigantes, supieron que era la hora. Se pusieron todos en posición y cuando vieron esos enormes bichos gigantes salir del agua, el, junto a los otros magos especiales empezaron la batalla. Se metieron en el agua y de detrás de la cabeza les salieron una especie de branquias y en los brazos y las piernas unas aletas.

Allí debajo todo era muy confuso, la bestia gritaba de dolor y una especie de magos intentaban que no le hiciéramos daño. Entonces fue cuando vio a sus padres al lado de Marcus, estaban como hipnotizados, no se movían ni lo reconocían. Tomás se separo del grupo y fue a buscarlos, les gritaba, pero no le escuchaban, estaban como muertos, entonces se le ocurrió hacer un hechizo que podría funcionar para salir de ese trance. Al principio no funciono pero Tomás no desistió.

De repente alguien lo cogió por detrás y intento llevárselo pero Tomás lucho con todas sus fuerzas y se batió a duelo con él. Cuando ya no había más peligro echó el hechizo con toda sus fuerzas y su padre se despertó, pero su madre no. Los otros magos seguían luchando y cuando los de afuera creían que los habían perdido todos salieron del agua con una gran ola detrás que los arrastro a la orilla.

Tomás había hecho un hechizo contra ella dentro del agua y que la había debilitado mucho. Al cabo de muchísimo rato la bestia se rindió y desapareció.

Llevaron a su madre a la orilla pero su madre nunca despertó, la fuerza mágica que habían usado en ella, había podido con ella y la destrozo.

La vida de Tomás y Ethan volvió a la normalidad, se fueron de nuevo a vivir a Darwin, pero cuando podían se escapaban a Saint-Malo para ver a Marian y Edge. La orden no volvió a molestarlos mas y pudieron vivir tranquilos para siempre.

Claudia Rubio Pons

1Btx A

4 comentaris:

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  2. La historia es entretenida aunque sigue el modelo típico de una historia de fantasía, quiero decir que su final era predecible. También he notado que el desenlace ha sido un poco precipitado, como si le faltara espacio para terminarlo, pero por lo demás su expresión ha sido correcta.

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  3. Es una historia muy fantástica, pero entretiene bastante,ya que da ese toque de niñez y de que eso no puede ser real.

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  4. ¡Hala! ¡Tomás convertido en una mezcla entre Harry Potter y los X-men! Conozco a un Tomás pero no sé si sería capaz de hacer todo esto.
    Entretenido relato, Claudia.

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