Me llamo Fer soy un periodista español y me encuentro en Sierra Leona (África) y no estoy de vacaciones precisamente sino secuestrado.
Soy periodista de El País y mi jefe me mandó aquí para hacer un reportaje sobre la guerra civil de sierra Leona. Al principio no me parecía una buena idea pero mi jefe me dijo que eso supondría un plus para mi carrera periodística, así que acepté.
Cuando llegamos un compañero llamado Jose y yo a Sierra Leona, nos explicaron que el conflicto era entre el Gobierno y los rebeldes. Estos amenazaban a la población y a la democracia. A los prisioneros que cogían o los hacían trabajar en las minas de diamantes o los mataban. Nuestra misión era estar cerca del conflicto, es decir, cerca de los enfrentamientos entre los dos bandos y filmar, hacer fotos…
A los dos meses de estar allí, cuando estábamos filmando en medio de un enfrentamiento, se acercó un coche con milicianos rebeldes. Bajaron del coche sacaron las armas y lo ultimo que recuerdo es que me dieron un fuerte golpe en la nuca con la culata de una AK-47. Nos secuestraron para pedir un rescate y con el dinero del rescate poder comprar armamento. Me desperté al lado de mi compañero José, asustado, en una cabaña hecha de bambú. De repente entraron dos rebeldes armados y nos sacaron a empujones. Nos llevaron hasta un hombre que parecía ser el jefe y nos empezó a hablar en una lengua que desconocíamos. Entonces yo le dije a aquel hombre que éramos periodistas españoles, que solo veníamos a hacer un reportaje. Y el hombre dijo algo y los dos rebeldes afortunadamente nos llevaron a la mina donde nos pusieron a trabajar. Para comer nos daban pan y agua.
Me entristecía mucho ver cómo los rebeldes enseñaban a los niños a matar gente, era espantoso, inhumano. Ponían a las personas a lo largo de una pared y obligaban a los niños que disparasen sus armas.
Ahora estoy aquí escribiendo esto en una cabaña de bambú donde nos tienen encerrados. Han pasado cinco meses y en lo único que pienso es en volver a casa junto a mi novia y abrazarla y besarla… y escapar de este infierno. Espero que pase algún milagro y pueda salir de aquí sano y a salvo con mi compañero José.
Una historia muy emocionante y que nos hace ver como lo están pasando algunas personas en el "Tercer Mundo". Te falta corregir alguna falta.
ResponEliminaEs una historia muy bonita, aunque un poco triste, aunque lo arreglas con ese final feliz. Se podría basar en hechos reales, por las circunstancias que indica. Está muy bien escrito, pero desde mi punto de vista, hay demasiados párrafos.
ResponEliminaEs una historia muy gratificante, porque despues de estar cinco meses encerrado, por fin puedes ver a la familia y a tu novia..
ResponEliminaNo acabo de ver la relación entre la fotografía y el texto pero el relato me parece bastante entretenido.
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